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Descalzo junto a los comerciantes que recibieron intimidaciones por parte de ARBA

Algunos de los pequeños empresarios, además de recibir multas de hasta 80 mil pesos y sufrir la clausura momentánea de sus actividades, denunciaron que los operadores estatales les sugirieron que “la próxima voten bien”.

Luego del conocerse el resultado de las Primarias, Abiertas, Simultáneas y Obligatorias -celebradas el domingo-, el Gobierno de la Provincia, a través de la Agencia de Recaudación de la provincia de Buenos Aires (ARBA), realizó un megaoperativo de control los comercios de las calles San Alberto y Brandsen.

Durante las maniobras, los agentes realizaron la clausura provisoria de decenas de comercios que no contaban con los documentos necesarios, y labraron multas de hasta $80.000. Según el relato de los comerciantes, todo se produjo en un grave tono de amenaza debido al resultado adverso del oficialismo.

En ese marco, algunos de los afectados se comunicaron con el Municipio y fue el propio intendente Alberto Descalzo, junto con su jefe de Gabinete, Pablo Descalzo, el que acudió al lugar, dialogó con los trabajadores y tomó intervención en el asunto.

Lo primero que hizo el jefe comunal fue comunicarse con la titular de Departamento de Fiscalización de ARBA, Magalí García, y con el secretario de Asuntos Municipales, Alex Campbell, para exigirles el cese de las suspensiones de actividades y las sanciones a locales del Municipio.

Uno de los comerciantes, llamado Pablo consideró que los empleados de ARBA fueron “a extorsionarlos después luego del resultado de las elecciones” y agradeció “la intervención del intendente”.

Por su parte Descalzo aseguró que ese tipo de maniobras “en un momento de crisis económica afectan la paz social del pueblo de Ituzaingó, porque atacan un lugar muy sensible”.

Y concluyó: “Yo voy a defender a Ituzaingó y a nuestro pueblo, no voy a permitir que cierren negocios que apenas tienen para comer”.